lunes, 11 de marzo de 2013

Pomponio Flato: Un Quijote romano


Con esta novela Eduardo Mendoza hace una especie de parodia de la moda de novela histórica que en los últimos años nos inunda por todos lados (igual que el Quijote en su día la hizo de los libros de caballerías, una comparación un poco pretenciosa, pero en fin).



Nuestro amigo Pomponio está buscando a lo largo y ancho del Imperio una fuente cuya agua tiene propiedades milagrosas (aunque lo único que encuentra es una diarrea cada dos por tres por beber agua de manantiales contaminados). En uno de sus viajes acaba en el pueblecito de Nazaret donde están preparándose para crucificar a un carpintero, José, acusado de matar al rico Epulón. El hijo de José, el pequeño Jesús, convencido de que Pomponio es un hombre justo, le contrata para que investigue y demuestre la inocencia de su padre.
 
Quien narra la novela es el propio Pomponio, en forma de una larga carta a su amigo Fabio. Su manera de escribir es rebuscada y llena de florituras, pero Pomponio no puede ocultar que es un auténtico vividor y lo que a día de hoy llamaríamos "un jeta", pero muy simpático.
 
Os transcribo una parte de la entrevista a José "el sospechoso", para que veais el tono del libro.
 
"-(...) Dime la verdad José: ¿mataste tú a ese hombre?
 - No -repuso dejando la sierra en el suelo y enjugándose la calva con la manga de su humilde túnica-. Dios dijo: no matarás, y yo cumplo fieslmente la voluntad de Dios. De natural soy poco dado a la violencia. Una vez dudé de la honestidad de mi esposa y estuve a punto de zurrarla. Por suerte no lo hice y todo se aclaró satisfactoriamente. Desde entonces me comporto con ejemplar mansedumbre".
 
A lo largo de la "investigación" vamos encontrando a otros personajes bíblicos que todos conocemos: María, José, Juan, Lázaro, Mª Magdalena... y descubriendo sus peculiaridades. El niño Jesús es absolutamente adorable.
 
En resumen, si queréis pasar un buen rato y reíros bastante con las reinterpretaciones históricas de Eduardo Mendoza, este es vuestro libro. Son 190 páginas que se leen en un pispás.
 
Hay libros de Mendoza que me han gustado más pero este está muy gracioso. ¿Lo habéis leído? ¿Qué os pareció? Haaaasta la próxima!!!

(Imagen tomada de "El bibliófilo enmascarado")

1 comentario:

  1. Me gusta Mendoza, su detective es ingenioso y Gurb es simplemente genial.
    Pomponio me hizo reir, ya desde su primer encuentro on semejantes bárbaros, y ese niño que no dice pero dice todo sobre su identidad...
    Este hombre es puro ingenio
    Besos

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