Memento Mori, de César Pérez Gellida

Hoy os traigo un libro al que llegué gracias a Laky, que organizó una lectura conjunta a la que nos apuntamos un montón de gente. Nunca había participado en una y me pareció muy divertida, íbamos hablando del libro en twitter y el propio autor nos comentaba cosillas! Un lujo.

En cuanto a Memento Mori, ¿de qué va? Ya sabéis que no soy partidaria de hacer grandes sinopsis, y menos en casos de novela negra, como este. Cuanto menos sepáis mejor, para que, como a mí, os suponga una agradable sorpresa.

 

 

Todo empieza en Valladolid, donde aparece el cadáver de una chica peruana a la que el asesino ha extirpado los párpados. El inspector Ramiro Sancho lidera la investigación, a la que se suma la atractiva catedrática de literatura Martina Corvo y un experto y peculiar psicólogo criminalista, Armando Lopategui, alias Carapocha. La ciudad de Valladolid es otro personaje más, un sitio donde nunca situaríamos a un asesino en serie, ¿verdad? Ya tengo ganas de volver y recorrer los bares y restaurantes que frecuenta el inspector Sancho.

 

A la vez que vemos cómo progresa poco a poco la investigación vamos viendo la historia desde la perspectiva del asesino, Augusto Ledesma (no es ningún spoiler, lo sabemos desde el minuto uno), un tipo inteligente, atractivo, rico... ¿Por qué le da a alguien así por meterse a asesino? Ahhh...

 

Podéis pensar que una novela de intriga donde vemos la perspectiva del asesino no tiene ciencia pero vaya si la tiene. La historia me recuerda a esos exámenes de mates en los que el profesor te decía: "Podéis traer al examen el libro, los apuntes y todo lo que queráis" y tú rezabas a todos los santos porque sabías que aquello iba a estar chungo de narices. Pues así es el argumento de Memento Mori: chungo de narices. Os recomiendo que cuando lo leáis lo hagáis en papel, porque seguro que vais a volver atrás en las páginas muchas veces, así como adelante para poder ver el glosario donde el autor nos aclara latinajos, términos informáticos y otras curiosidades varias. Yo lo leí en el e-book y me arrepiento, en papel lo hubiese disfrutado mucho más.

 

El prólogo es brutal, te pone los pelillos de punta. Y el final... he leído por ahí alguna opinión que lo tachaba de previsible. Yo debo de ser poco avispada porque no me lo esperaba para nada. Muy buen cierre para la historia que te deja con ganas de echarle mano a la segunda parte, Dies Irae, lo antes posible. Mira que me había prometido a mí misma estar una buena temporada sin trilogías ni series de libros, pero César Pérez Gellida ha conseguido que renuncie a mi propósito.

 

Resumiendo, muy buen libro, lo recomiendo al 100%. Ya os contaré cuando me haga con Dies Irae si mantiene el listón de la primera parte.